Piensa en dinero.

El hábito Base, una vez que hemos comenzado nuestro cambio con respecto a los hábitos del dinero, lo siguiente se vuelve crucial, olvida todas las enseñanzas de la familia con respecto al dinero, al menos, que seas parte de una familia rica que te haya empujado a ser empresario desde pequeño, pero como en general no pasa así, lo más común es que nuestra familia nos haya boicoteado nuestra capacidad de tener dinero, a través de los consejos y dichos de la abuela; y a parte, como esos dichos están cargados de cierta sabiduría es muy difícil revalorarlos, el problema es que los tiempos si cambian y muy rápido y lo que era válido antes ahora no lo es, por ejemplo, en familia nos decían: “Estudia mucho para tener un buen empleo”, y como decía anteriormente, no es que esté mal pero habla en esa frase cierto sentido de apostolado de trabajar permanentemente para alguien, mucho sacrificio para lograr una jubilación, donde queda en esa vieja frase la parte de “realízate, has mucho dinero, trabaja para ti mismo, persigue y conquista tu independencia financiera y sé feliz en la autorrealización, hoy ni siquiera tener un empleo es seguro, es más, es lo más inseguro del mundo, la experiencia ya no es valorada porque todo cambia demasiado rápido, es mejor haber estado en muchos empleos y generar capacidad de adaptación que tener 20 años en una compañía. En la época de mis abuelos, y un poco la de mis papás, para evaluar un empleo se preguntaba por las condiciones de jubilación, las grandes empresas de la post- guerra generaban bienes que duraban para siempre, hoy todo es desechable y las compañías se reinventan todos los días.

El otro problema del empleo es que nos podemos pasar toda la vida trabajando con el único objetivo de no trabajar más, lo irónico de la vida de hoy es que todo lo que se inventa es para comodidad del hombre moderno, para trabajar menos, sin embargo, obtener esas comodidades cuestan una vida de trabajo. Las grandes compañías no dejan de inventar comodidades y juguetes para vender y vender y los bancos prestar y prestar, todos se enriquecen a costa del trabajo incansable e interminable de millones de personas. Todos los días, esos millones de personas salen al trabajo para obtener un salario que no les alcanza para nada, sobreviven, y a veces para ganar más consiguen otro trabajo que también les van a pagar mal y no les va a alcanzar.

La gente en general debe transformar su pensamiento con respecto al dinero antes de ir a conseguir otro empleo, la felicidad no se da en el sacrificio de trabajar mucho toda la vida; la sugestión familiar es muy poderosa y nos lleva a comportarnos de la misma forma que nuestros padres, pero la realidad que ellos vivieron es muy diferente a la nuestra y peor a la de nuestros hijos, el gran problema radica que todas las personas tenemos los mismos deseos en mayor o menor medida, todos queremos realizarnos, tener comodidades y ser felices, pero las reglas del mundo de hoy, se hacen para la gente que tiene dinero, y el no tenerlo nos lleva a una frustración y, en algunos casos, a la desesperación.

Debemos dejar de ver al dinero como una necesidad para sobrevivir, sino como una herramienta para mejorar.

Las personas todas, debemos dejar de trabajar por el dinero, y hacer que el dinero trabaje para nosotros, hacer de esto nuestro pensamiento más fuerte, en el hábito uno dijimos que vamos a ahorrar el 10% de nuestro ingreso, que ni nos empeora nuestra situación financiera y si nos convierte en inversionistas, que al 2do ahorro ya estamos acumulando riqueza, pero lo más importante es que por pequeño que sea el interés ganando con nuestro ahorro en el Banco, es un dinero que recibes sin trabajar ni mover un dedo, nuestro dinero trabajó para nosotros, no durmió, no se enfermó, no nos pidió nada y sin embargo nos dio más dinero real, cuando tenemos una inversión negociada con una tasa de interés compuesto, es decir, que el interés de cada período se capitaliza y vuelve a generar intereses, si además en cada período agregamos capital nuevo (nuevo ahorro), entonces nuestra inversión crecerá mucho más rápido. 

La constancia en el ahorro, y el tiempo es lo que da resultados.

Una inversión con una tasa de 9% anual, en interés compuesto, puede duplicar el monto original en 9 años, si quisiéramos que nuestro capital se duplicara en 5 años, necesitaríamos una tasa del 14.5% anual, por ejemplo con un capital de 1,000 sería:

Realiza muchos ejercicios para que te sea natural pensar en términos de interés compuesto.

Entonces debemos invertir con una gran ganancia de interés y agregar nuevo capital periódicamente.

Hugo Villanueva Cantón

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